jueves, 17 de febrero de 2011
Sueño de un pescador
Era un día hermoso de calor, en una casa vivía un anciano con su nieto, que estaba en la cama, un poco resfriado. Su abuelo sentado, en su silla, al lado de la cama le dijo:- Te voy a contar un cuento que se llama “Sueño de un Pescador”.
“Había una vez, una humilde casa era de ladrillos y techo de chapa. Se encontraba a la orilla del río. Allí vivía un chico- que se llama Manuel y su padre. Eran pescadores que se ganaban su vida pescando.
Hacia un año que la madre fallecido a causa de una enfermedad grave y el padre se encontraba solo y extrañando a su mujer. Manuel estaba un poco triste.
Una mañana Manuel fue a la escuela caminando por un camino de tierra. Cuando llegó a la escuela saludó a sus compañeros y al entrar al salón, el maestro les dijo:-De tarea tendrán que hacer una pequeña historia sobre de sus vidas.
Terminó la clase y Manuel salió contento de alegría. Por fin, llegó a su casa y escribió el sueño su vida: quería ser millonario.
Al otro día fue a la clase y sentó en el banco, sacó su tarea y se la entregó al maestro. Éste leyó el relato por un buen rato y le dijo:- “Vos querrás ser multimillonario pero nunca podrás porque eres pobres”, y se río del muchacho.
Manuel se sentó en el banco, muy triste. Cuando terminó la clase se fue a su casa.
Su padre vio que tenía el rostro pálido y le preguntó:- ¿Qué té pasa Manuel que estás muy triste?
Le relató lo que pasó en clase. El padre le dijo:- “Manuel, vos sus tenés que estar triste, el maestro se equivocó, vos seguí con esto”
Manuel se hizo grande, luchó mucho, empezó a trabajar duro en la pesca. Después de cinco años puedo comprar un buque pesquero para juntar toneladas de pescados. Tuvo mucho éxito. Luego abrió unas pescaderías y formó una familia.
Hace varios años el profesor se había reído de él, ahora Manuel recordaba sus palabras y le gustaría mostrarle este presente”
Así termina el cuento. El abuelo cerró el libro, lo dejó sobre la mesita de luz y se levantó de su silla para ir al baño, su nieto vio que se cayó al suelo un papel que estaba adentro del libro y descubrió, al leerlo, que el cuento estaba escrito con la letra de su abuelo. Era un resumen de la historia de su vida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Qué bonito Héctor.
Yo creo que cuando luchamos con fuerza por un sueño, éste al final se cumple.
Es un mensaje precioso.
Un beso
Publicar un comentario